MI EXPERIENCIA EN…
Sanación Espiritual por Arquetipos.
A Lidia, la conocía como compañera de profesión, habíamos coincidido en el algún taller y en series de televisión. Al cabo de los años nos volvimos a ver, y me habló de su nueva faceta de terapeuta y su método de trabajo. Yo llevaba años haciendo todo tipo de terapias para conciliarme conmigo y con la vida, amándome un poco más cada día. Y mientras me hablaba, sentí claramente, que sabía de lo que hablaba, que pilotaba muy bien, y que me resonaba todo lo que me exponía. Así que me puse en sus benditas manos y nos pusimos a trabajar, primero con sesiones individuales y luego con talleres grupales.
He de decir, que yo venía con una extensa trayectoria de trabajo personal con todo tipo de terapias: gestal, costelaciones familiares, terapia de polaridad, renacimiento, kinesiología, psicomagia…
Pero la profundidad de comprensión, integración, transmutación, sanación que hemos realizado juntos y con compañeras, ha sido exponencialmente admirable. Está claro que hay que disponer de tu propia valentía para cambiar lo que no te gusta de ti, de transmutar en amor propio, todos los traumas y heridas que arrastramos de nuestra experiencia vital, así como de la familia y otras vidas. Realmente hay mucha densidad “oscura” en nuestras vidas y no es plato de buen gusto, mostrar tus miedos, debilidades y vulnerabilidad. Pero sientes que en manos de Lidia con su formación, experiencia vital, generosidad y sabiduría, estás protegido, amado, respetado, guiado, para llegar a las profundidades de tu alma y al dolor más ancestral que te puedas imaginar, acompañado de la soledad, más absoluta y vacía, nunca antes sentida. Así como el amor y el agradecimiento de sentirte uno con la fuente, de sentirte libre y amado contigo mismo. De atreverte a ser y estar, con el ser real que eres y no el que tus padres o la sociedad quieren que seas.